En la época de la niñez pueden existir una serie de
aspectos que nos hacen pensar que nuestro hijo/a se encuentra bajo de
autoestima. Esta situación requiere de una atención especial por parte de los
padres, ya que puede ser causa de problemas importantes de comportamiento en
edades más avanzadas.
Comencemos por definir la Autoestima como una serie
de percepciones y pensamientos que en unas ocasiones son de nuestra propia cosecha, y en
otras, son fruto de las ideas y percepciones que los demás tienen de nosotros
mismos. La importancia de la autoestima es que afecta
directamente a nuestra forma de ser y a
la percepción de cómo nos vemos frente los demás. Un problema de autoestima afecta
a nuestro comportamiento y a la manera de relacionamos. Existen varias
pruebas o protocolos adaptados a edades escolares para evaluarla. Por mi parte,
os dejo algunos indicadores que padres/madres pueden tener en cuenta en el día
a día de sus hijos/as.
1. Necesidad
de ser aprobados cuando logran algo.
2. Buscar
la atención de los adultos.
3. No
inician algo por miedo a no conseguirlo.
4. Si
no los aprueban se sienten inseguros.
5. Su
malestar lo canalizan con rabia.
6. Buscar
la perfección, ya que no están contentos con lo que realizan. Piensan que
siempre hay fallos.
7. Sonríen
con dificultad.
8. Falta
de espontaneidad.
9. Marcado
sentido del ridículo.
10. Ven
las equivocaciones como catástrofes.
11.
Asumen la posición de victimas.
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